Qué ver y dónde comer en Conil de la Frontera


Conil de la Frontera, un paraíso para los amantes del mar y la buena mesa. En Conil hay mucho qué ver pero además de playas bonitas, es un pueblo que conserva sus raíces. Dicen que hay gente que es más de playa y otra más de montaña. No sé si esto es totalmente cierto, pero si tuviera que estimar, diría que la gente que prefiere playa gana la partida con creces.




Cada verano la costa de España se llena de sombrillas y toallas coloridas, Conil de la Frontera, a pocos kilómetros de Vejer de la Frontera en la provincia de Cádiz, es el sueño de cualquier amante de la playa. Con 6 playas diferentes en las que poder disfrutar bajo el sol, Conil no solo es playa, se trata de uno de los pueblos más pintorescos de la Costa de la Luz, con lugares de alto valor ecológico e histórico.

¿Qué ver en Conil de la Frontera?

Caminar por las callejuelas de Conil de la Frontera para disfrutar de su centro histórico marinero es algo que no puedes dejar de hacer si visitas Conil. Casas blancas, angostas calles encaladas y acicaladas por buganvillas, geranios y claveles, sus patios y un recorrido por su historia donde se respira su pasado musulmán. Conil de la Frontera conserva la arquitectura típica andaluza de origen árabe donde resalta el templo de Santa Catalina, la iglesia de la Misericordia y la gótica Torre de Guzmán, que fue parte del conjunto defensivo de la ciudad. Además, el municipio cuenta con valiosos espacios naturales, destacando los Pinares de Roche y el Colorado. Es un típica localidad de pescadores y sus suaves colines y playas doradas forman parte importante de su historia.

Alguno de los lugares más emblemáticos de Conil:

  • Casco histórico

¿Dónde comer en Conil de la Frontera?

Complementando a las playas y a sus espacios naturales, la gastronomía de Conil de la Frontera también ha crecido mucho, tanto en cantidad como en calidad, y comer en Conil es ahora otro de sus atractivos. Y no solo en verano. Sus campos y sus costas producen los productos más preciados de la provincia. De la huerta los alcauciles en Cuaresma, los tomates rojos y bien grandes en verano; y del mar, los pescados más sabrosos como bocinegros, urtas, pulpos… un gran catálogo que marida a la perfección con productos de la huerta al plato.




  • Para empezar el día… un buen desayuno

Para poder disfrutar de Conil en todo tu esplendor hay que empezar el día cogiendo fuerzas. En el Chiringuito El Roqueo donde puedes disfrutar de un buen desayuno a orillas del mar donde la brisa al despertar hace que empieces el día con buen sabor de boca.

Pero si eres más de desayunar un buen pan de pueblo con manteca untada no puede faltar entre tus predilecciones la visita a la venta El Colorado donde comenzarás el día a tope de energía.

  • Pa’ comer

Para continuar el día y seguir con el estómago lleno, Conil presta a sus visitantes y autóctonos numerosos lugares en los que poder hacer un descanso y reponer fuerzas. Pequeño, pero surtido de todo lo que a uno le pueda apetecer, el mercado de abastos de Conil con su puestos de pescado y amplia presencia de especies locales, hace imprescindible la visita. Bocinegro, urta, pargo y corvina son los imprescindibles que no puedes pasar por alto en este lugar.

Y del mercado a la mesa. En el mes de junio Conil celebra la Semana del atún. La organiza el Ayuntamiento de Conil y participan una treintena de establecimientos que en esos días tienen una carta especial dedicada a este pescado que se pesca en las almadrabas de la localidad. Pero no solo el atún destaca en Conil, el bocinegro no es un pescado muy conocido pero los expertos lo llaman el sibarita del mar por lo bien que se alimenta. Desde Conil las piezas viajan a media Europa y las que se quedan se pueden disfrutar a pie de playa. En restaurantes como La Fontanilla o en una terraza de ensueño en la Venta Cabo Roche puedes probarlo y no te arrepentirás.

La Fotanilla

Venta Cabo Roche

Y si nos adentramos en el mismo pueblo de Conil está el restaurante Blanco y Verde. La especialidad de la casa son las carnes de ternera retinta a la parrilla y los guisos de cuchara y si lo tienen no hay que perderse el atún en tomate. En las afueras El Roqueo, con un imponente balcón al mar, lugar donde el atún sobresale con maestría bien sea en manteca o con una  deliciosa salsa de tinta de calamar.

                                     

Blanco y Verde                                                                                         El Roqueo

  • Y para terminar… El postre estrella

En Conil le llaman trasplante, cuenta la leyenda que es por las tres plantas de bizcocho que tenía el dulce. Ahora tiene dos, recubiertas de coco y separadas por una suave crema. Los trasplantes son lo que conocemos también con el nombre de Media Luna. 

 

 




También te puede interesar